El Maracuyá o Parchita se llama Passiflora edulis y pertenece a la Familia taxonómica de las Passifloraceae, también se le conoce como granada china; es una planta trepadora de más de 20 metros, de tallo leñoso, que crece silvestre en Centro y Sudamérica, también se cultiva en climas tropicales y subtropicales; en la actualidad se producen más de 20 variedades de color amarillo, rojo y morado; se trata de una fruta dulce, ligeramente ácida, la cual se usa para hacer mermeladas y en la gastronomia actual principalmente se le consume como agua fresca para acompañar los alimentos, nieve, paletas y para sazonar varios tipos de ensaladas.

La Maracuyá o Parchita, en cien gramos nos proporcionan 98 kilocalorías; el 70% de su peso es agua; tiene el 0.7% de grasa; el 23% son carbohidratos, y la mitad de ellos son sacarosa, con un indice glicémico cercano a 50, razón por la cual debe consumirse con mucha prudencia por las personas con diabetes, con la recomendación de vigilar los niveles de glucosa en ayunas y dos horas después de cada alimento.

De cada cien gramos de Maracuyá, el 2.2% son proteínas y el 11% de su peso son fibras solubles a base de pectinas y amilopectinas, las cuales nutren a la microflora y así, aumentan las defensas del sistema inmune.

En 100 gramos de Maracuyá hay Vitamina A 64 ug; Betacarotenos 0.25 ug: Vitaminas del complejo B: Tiamina B1, 10 ug: Riboflavina B2 130 ug; Niacina B3 1500 ug; Piridoxina B6 100 ug y Ácido Fólico B9 20 ug; Vitamina C 30 mg; Vitamina E 20 ug y Vitamina K 0.7 ug.

Cien gramos de Maracuyá nos proporciona minerales como el Calcio con 12 mg; Fósforo 68 mg; Hierro 1.6 mg; Magnesio 29 mg; Sodio 28 mg; Potasio 348 mg; Cobre 0.02 ug; Selenio 1 ug y Zinc 100 ug. En la Medicina Tradicional de Sudamérica se recomienda para la ansiedad, como sedante un cocimiento de las hojas y para los cólicos menstruales.