El Ajonjolí de llama Sesamum indicum, y pertenece a la Familia Taxonómica de las Pedaliaceae, es una herbácea de uno a uno y medio metros de altura; se trata de una semilla oleaginosa que llegó a México a través de los esclavos originarios de África, de la región de Etiopía, y ampliamente cultivada desde la antigüedad en la India.

Las recetas más antiguas refieren que en la antigua Babilonia y en Roma era muy común su consumo para prevenir el envejecimiento en las mujeres y para la potencia sexual en los hombres. El ajonjoli es la semilla más rica en calcio; que va desde los 670 hasta los mil 500 miligramos (mg); de acuerdo a las tablas técnicas del Instituto Nacional de la Nutrición, 100 gramos contienen 1038 miligramos; contra 119 miligramos de la leche.

100 gramos de ajonjolí tienen 561 kilocalorías; 22% de proteina; la carne tiene 20%; de un total de 44 gramos de grasa %; el 58% son ácidos grasos insaturados, de buena calidad para consumo humano, predominando los poliinsaturados; y 24% de carbohidratos; además contiene el 6.3% de fibra dietética y de humedad sólo el 4%.

El Ajonjolí es muy rico en otros minerales necesarios para el desarrollo de los seres humanos: consideramos un promedio de 930 miligramos (mg) de Calcio por cada 100 gramos de semilla; Hierro: 9.5 mg: pero en la última actualización de datos, Nutrición le atribuye un promedio de 19 mg; la carne de res tiene 2.3 mg y el hígado 8 mg; Fósforo: 690 mg; Potasio: 725 mg; Magnesio: 351 mg; Zinc: 7800 ug: Selenio 11 microgramos (ug).

En un estudio comparativo, la Secretaría de Salud de Inglaterra encontró la mejor calidad ósea en la población de origen africano y no en la inglesa; atribuyéndolo al consumo cotidiano de ajonjolí.

Además, el Ajonjolí es fuente de vitaminas del complejo B: Tiamina B1: 1240 ug; Riboflavina B2: 240 ug; Niacina B3: 5000 ug; Piridoxina B6: 400 ug: Ácido Fólico 57 ug; Vitamina A 3 ug; y vitamina E.

Por todas estas características nutricionales, El Noticiero de la Salud recomienda sustituir la leche de vaca con una lechada a base ajonjolí, almendras, chía y linaza; sobre todo en el embarazo y lactancia, además recomendamos su consumo en todo el ciclo de vida.