El Cacao se llama Theobroma cacao y pertenece a la Familia Taxonómica de las Esterculiaceae, es un árbol de 6 a 10 metros de altura, originario de la Cuenca del Amazonas en Sudamérica; fue domesticado por los Mayas de la península de Yucatán, Chiapas y Guatemala; se cultiva bajo la sombra de grandes árboles, principalmente en los climas cálidos y húmedos a menos de 400 metros de altitud, desde tiempos prehispánicos: seguramente desde que comenzó la agricultura, hace unos 10 mil años; la semilla era usada como moneda de cambio y las élites gobernantes lo consumían como una bebida sagrada estimulante: Theobroma en griego es alimento de dioses.

La semilla de Cacao es rica en antioxidantes como la Epicatequina, un polifenol que previene los infartos cerebrales, cardíacos, hipertensión, cáncer y diabetes; además de varios flavonóides y materias primas para que el cuerpo humano fabrique neurotransmisores como la serotonina y la dopamina, provocando alegría y el gusto por vivir muchos años; es el alimento más rico en Hierro, con 34 mg y Zinc con 9000 ug; tiene alcaloides estimulantes como la Teobromina, el más abundante con el 1.2%, el cual puede provocar insomnio, así como un poco de cafeína con el 0.2%.

Cien gramos de pasta de Cacao, las semillas sin cáscara y molidas, proporcionan 629 kilocalorías; sólo el 3.6% de su peso es agua; el 53% de su peso es grasa; 22% son carbohidratos; el 17% son proteínas y el 4% de su peso son fibras solubles a base de pectinas y amilopectie nas, las cuales nutren a la microflora y así, aumentan las defensas del sistema inmune.

En 100 gramos de pasta de Cacao hay Vitaminas del complejo B: Tiamina B1, 220 ug; Riboflavina B2, 340 ug; Niacina B3, 1600 ug; Piridoxina B6, 160 ug y Ácido Fólico B9, 27 ug.

El Cacao, en 100 gramos, nos proporciona minerales como el Calcio, con 65 miligramos (mg); Fósforo 600 mg; Hierro 34 mg: Magnesio 292 mg; Sodio 4 mg: Potasio 830 mg: Zinc 9000 microgramos (ug) y Selenio 500 ug.

El Chocolate amargo, disminuye el riesgo de sufrir un infarto cerebral; reduce las arritmias y disminuye el riesgo de padecer cáncer de colon.

El Centro de Investigación de la Sociedad Danesa contra el Cáncer, está desarrollando un Proyecto de investigación a largo plazo: "Dieta, Cáncer y Salud", en el cual se ha involucrado a 55 mil 500 personas de Dinamarca: 26 mil 400 hombres y 29 mil 100 mujeres, con un rango de edad entre los 50 y los 64 años. Los primeros resultados de la investigación se dan a conocer después de más de 13 años de observaciones, a partir del año de 1993.

En un primer avance, se da a conocer el efecto de consumir una ración diaria de 30 gramos de chocolate amargo, observándose una reducción del 17% en el riesgo de padecer una fibrilación auricular, conocida coe múnmente como arritmia; enfermedad que afecta al 25% de los adultos.

Consumir 30 gramos de chocolate amargo al día, redujo los riesgos de padecer un infarto cerebral y previno el desarrollo de cáncer de colon.

Los primeros avances de este proyecto de investigación a largo plazo, fueron publicados en la revista científica Heart.

LA EPICATEQUINA, UNA MOLÉCULA PRESENTE EN LA SEMILLA DEL CACAO, PROGRAMA A LAS CÉLULAS CANCEROSAS PARA QUE SE AUTODESTRUYAN, SIN AFECTAR A LAS CÉLULAS NORMALES.

Las epicatequinas son un grupo de sustancias del grupo de los flavonoides con los cuales se han hecho varias investigaciones, las cuales han demostrado un efecto protector para prevenir los infartos y para regular la presión arterial alta.

Ahora, se están desarrollando proyectos de investigación, en el Laboratorio de Oncología Molecular y Estrés Oxidativo, de la Escuela Superior de Medicina, del Instituto Politécnico Nacional, bajo la dirección del Dr. José Rubén Garcia, a través de cultivos celulares de diferentes tipos de cáncer de mama, con resultados muy alentadores, pues la epicatequina de las semillas del cacao, programa a las células cancerosas para que se autodestruyan, sin afectar a las células normales, demostrando un claro efecto anticancerigeno.

La Investigación del Dr. García es muy relevante, porque se trata de una molécula que sólo afecta a las células cancerosas; situación que no ocurre con la mayoría de sustancias que se usan en las quimioterapias, las cuales, además de afectar a las células cancerosas, también afectan a las células normales y de ahí que se registren los efectos secundarios que provocan daños graves a los pacientes.

Otro resultado importante de estas investigaciones, han consistido en combinar la epicatequina con sustancias que se usan en quimioterapia, como el taxol y el tamoxifeno, comprobando que se acelera el efecto anticancerígeno y por lo tanto se requieren menores dosis de estos medicamentos, lo cual representa una disminución de los efectos secundarios, adversos para los pacientes.

El equipo de investigación del Dr. García, ya identificó los genes mitocondriales, responsables de programar la autodestrucción, de manera de las células cancerosas.

La siguiente fase de la investigación, en ratones, ya se encuentra en marcha y en este Noticiero de la Salud, esperamos seguir dando estas buenas noticias, provenientes del Instituto Politécnico Nacional. La información nos llega a través de Isaac Torres Cruz, de Crónica.